domingo, 17 de diciembre de 2017

Eslida-Ahin-Eslida

Ahín
Fecha: 10/12/17
Tipo de ruta: Circular
Lugar de inicio: Eslida, La Plana Baixa, Castellón
Hora de inicio: 8 h 22 min
Duración: 4 h 36 min
Distancia: 12,74 Km
Dificultad: Media
Altura mínima: 343 m
Altura máxima: 743 m
Indice IBP: 66
Calificación (1-10): 8
Recorrido: Eslida – Coll de Barres – Barranc de la Caritat – Font de la Caritat – Moli de Guinza – Moli de l’Arc – L’Arquet – Ahín – Font de San Ambros – Font de Sant Josep – Font de Ferro – Font de Fosques – Eslida.

Cómo llegar:
Saldremos de Algemesí con dirección a Alginet, por la CV-525, justo antes de entrar en esta ultima población tomaremos la A-7, Autovía del Mediterráneo, con dirección a Valencia, una vez pasado el Centro Penitenciario de Picasent continuaremos por la derecha con dirección Madrid, Barcelona, pasaremos de largo la capital y continuaremos por la A-7 hacia Sagunto, una vez rebasada la población de Sagunto continuaremos por la A-7 hacia Vall d'Uxó y después llegar a la altura de la población de Nules, donde nos desviaremos a nuestra izquierda por la CV-10, Autovía de la Plana, con dirección a Betxí. Antes de llegar a Betxí nos desviaremos a nuestra izquierda por la CV-223 con dirección a Artana, población que atravesaremos y continuando por la CV-223 nos llevará a Eslida. Una vez en la población nos desviaremos hacia nuestra izquierda en busca de la Avenida Francisco Mondragón, continuaremos por ella hasta salir de la población junto al cementerio en donde en la calle de nuestra izquierda encontraremos un lugar en donde dejaremos aparcado nuestro coche, y que será el lugar en donde iniciaremos nuestra ruta de hoy.

Descripción de la ruta:
Esta semana la ruta discurre por las cercanías de la Eslida.
Se encuentra ubicado en el centro la Sierra de Espadán, en las cercanías del pico Espadán con 1.042 metros de altura. El pueblo se halla adosado al monte del Castillo situado al pie del Puntal del Aljibe. Su fascinante orografía, cuenta con frondosos bosques de pinos y alcornoques, está representada por los picos La Costera, Tarraguán, Puntal del Aljibe, Fonillet, La Batalla, Cocons, Maset, Solana la Mina. Las primeras noticias de pobladores del valle de Eslida las encontramos en los restos de ofrendas funerarias halladas en la Cueva de l'Oret y pertenecer a la Edad de bronce. Su origen musulmán, el trazado de sus calles lo revela claramente, tuvo en esa época una gran actividad llegando a contar con una escuela coránica.
Fue conquistada por el rey Jaime I quien, en 1242, otorgó la primera carta puebla. En 1255 es donada a Teresa Gil de Vidaure y posteriormente perteneció a los duques de Medinaceli. Tras la Reconquista, Jaime I respetó la autonomía de los moriscos que habitaban estas tierras, y aunque formaba parte de la hijuela de Vall de Uxó, el cadí residía en Eslida. El castillo de Eslida se unió a la revuelta de Al-Azraq de 1247. El 19 de septiembre de 1256 tuvo lugar la batalla de la Sierra Espadán. Durante la guerra de las Germanías, como quiera que los moriscos tomaron el partido de los nobles se les obligó a bautizarse para incrementar con ellos el número de las fuerzas de los agermanados. Eslida participó activamente durante la sublevación morisca de la Sierra de Espadán de 1526.En 1609, la expulsión de los moriscos causó su total despoblamiento. En 1612 se otorgó una nueva Carta Puebla por la que se repobló la Baronía de Eslida, que en 1633 pasa a manos de la Casa de Medinaceli, que construyó un horno, un hostal y varias almaceras en enfiteusis, dando nuevo esplendor a la villa. Algunos de estos edificios todavía se conocen como La Casa del Duc, y la calle del Porxet. En 1910 alcanza el máximo de su población con 1.522 habitantes.
Desde la parte alta del pueblo de Eslida, junto al calvario, dejamos el pueblo por el camino del cementerio remontando el barranco de l’Oret. Llegamos a una primera intersección del camino, en donde continuaremos por nuestra izquierda con dirección al Coll de Barres. Nosotros seguiremos por la senda que sigue remontado el barranco y que nos deja en un cruce con una pista, la cruzamos y continuamos por senda con dirección siempre al Coll de Barres. Esta senda tras un tramo de camino para pasar por unos campos y una casas, de nuevo por senda, nos conduce hasta llegar junto a la pista pero sin salir a ella continuaremos por senda para en unos metros mas llegar al cruce con la pista en el Coll de Barres, la parte más alta de nuestro recorrido y con magníficas vistas del Pico de Espadán y del Pico de la Batalla. Estamos en los montes Tarraguán.
Coll de Barres
Continuamos recto en la pista con dirección Ahin, y dejamos de nuevo la pista enseguida por una senda que junto a un cartel de los montes desciende por nuestra izquierda, ahora por la otra vertiente y que en un corto zig-zag nos deja en el cruce con una pista en donde continuaremos por nuestra derecha, para después de un tramo por ella llegaremos al cruce con la pista que dejamos en lo alto del Coll de Barres y en donde continuaremos por nuestra izquierda por la cabecera del Barranc de la Caritat y que nos acompañará hasta Aín.
Pasaremos un desvío a nuestra izquierda con un pequeño acueducto, nosotros continuaremos recto. Bordeamos por la derecha el promontorio del Castillo de Aín, (siglo XII) con su torre del Homenaje nos observa desde su atalaya y se va quedando a nuestra izquierda y atrás, a medida que vamos progresando hasta alcanzar la pista, pasando junto al Molí de Guinza.
En funcionamiento desde el siglo XVIII al XX, se compone de dos alturas. Adosada a su parte trasera hay una balsa con la doble función de riego y proporcionar fuerza hidráulica al molino.
Es uno de los molinos que mas tarde dejaron de funcionar. Es un molino de ruedas horizontales que aprovecha la infraestructura de regadío y forma parte del conjunto de aprovechamiento del agua del sistema de riego. La presión que ofrece la altura de la balsa de riego generaba la fuerza suficiente para mover las rueda de piedra y la salida del agua bajo el edificio incorpora de nuevo el agua a la acequia principal para su posterior aprovechamiento.
Más abajo el GR enlaza con el sendero local SL-CV 27 y con la ruta roja del Parque Natural de la Sierra de Espadán. El camino sigue por un frondoso bosque de alcornoques y cuando alcanza el lecho del barranco, siempre con agua se rodea de una vegetación de ribera: fresnos, sauces, chopos, etc.
Poco más adelante encontramos el conocido Molí de l’Arc, con un acueducto que en sus tiempos fue un molino harinero alimentado por las aguas del barranco y que son una parte importante de la arquitectura rural de la sierra. De construcción entre los siglos XVII y XVIII, es uno de los mejores conservados, con su casa integra y muy reformada.
Molí de l'Arc y l'Arquet

Como el de Guinza se encuentra en el curso del Barranc de la Caritat, con las mismas características técnicas y de funcionamiento. A continuación pasamos por l’Arquet, acueducto de riego construido en 1891 en argamasa y piedra para llevar el agua a los regadíos de la parte norte del barranco, es uno de los muchos construidos en la zona aprovechando con ellos todas las tierras posible para el regadío y mediante un ingenioso calendario de turnos se conseguía un enorme aprovechamiento del agua. Se alimenta de la acequia principal del barranco saltando un fuerte desnivel.
Entramos a Aín por el calvario, al igual que hicimos en la salida de Eslida. Emplazado en una cálida hoya adornada por pequeñas huertas de frutales y hortalizas, y, rodeada de elevadas y escarpadas montañas, con una rica y apretada formación boscosa de alcornoques y pinares, Ahín ofrece un bello y encantador paisaje.
De origen árabe, su nombre significa fuente. Fue conquistada por Jaime I en 1239 que mantuvo a la población musulmana, bajo la jurisdicción del cadí de Eslida según consta en la carta puebla de 1242. Habitaron estas tierras en paz y concordia, conservando sus tradiciones y formas de vida hasta el principio del siglo XVI, cuando se les impuso el bautizo bajo pena de muerte o destierro. Después de pertenecer a la Baronía de Jérica (hasta el año 1369) y al Ducado de Segorbe, en el siglo XVI pasó a ser propiedad real. En 1526, al tratar de imponerles el bautizo los moriscos de Ahín se sumaron a la sublevación de la Sierra de Espadán, y amparándose al refugio natural de estas escarpadas montañas presentaron una tenaz resistencia, hasta que la revuelta fue sofocada por las tropas de Gaspar de Montsoriu. La ocupación de Ahín impidió, dada su situación estratégica, que se extendiera la rebelión. Cuando, en 1609, se decreta la expulsión de los moriscos los de Ahín se refugiaron nuevamente en la Sierra de Espadán, pero finalmente fueron rendidos y exiliados. Según Sanchis Guarner, a principio de los años sesenta Ahín contaba con 298 vecinos, cifra que descendió a 131 en 1994.
Continuamos nuestro camino bordeando la población por la derecha, por sus últimas calles para llegar a la Font de San Ambros. Un lugar con una área recreativa con mesas y bancos junto a la fuente y que nos permite hacer una parada para reponer fuerzas con nuestros almuerzos. Una vez terminada esta parada de habituallamiento continuaremos nuestro camino por la senda que asciende por la misma llegada al área recreativa de la fuente.
Font de San Ambros
Esta senda nos lleva a un nuevo cruce, junto a lo que parece una vieja calera, en donde continuaremos por nuestra izquierda, para llegar a la siguiente bifurcación, junto a un cartel de coto de caza y en donde también continuaremos por nuestra izquierda en descenso. Comenzamos a realizar un descenso bastante rápido y que nos conduce hasta el cruce con una pista en una de sus cerradas curvas y en donde seguiremos por nuestra izquierda. Esta pista discurre paralela al Barranc de Eslida hasta llegar a la Font de Sant Josep en donde encontramos un a pequeña área de descanso, y a partir de aquí continuaremos nuestro camino por el cauce del barranco, para después de un tramo desviarnos por nuestra derecha y pasar por la Font de Ferro. Continuado por unos escalones de cemento entre unos olivos.
Llegamos a la Font de Fosques, muy visitada en todo tiempo, salimos a un camino asfaltado y por nuestra izquierda saldremos ahora ya a la carretera de entrada a Eslida, continuando por nuestra derecha, y por la primera de sus calles nos desviamos a nuestra derecha por unos pocos escalones que nos llevarán por senda hasta el cruce de nuevo con la carretera continuando también ahora por nuestra derecha, pasando junto al cementerio para llegar al punto de partida y dar por finalizada nuestra ruta de hoy.
Gracias por la ayuda en la descripción de la ruta a www.femecv.com y blogs.comunitatvalenciana.com
Hasta pronto.

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1 comentario:

  1. ¡Hola, Pepelik! Espadán ofrece múltiples posibilidades y todas ellas de una gran belleza y calidad senderista, como ésta que nos presentas. Espadán nunca defrauda.
    Un abrazo y Feliz 2018.

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